El pasado 17 de mayo durante la décima séptima sesión de cabildo, el presidente municipal de Tulum, Marciano Dzul, presentó un acuerdo para reactivar la reincorporación de Yalchén y San Silverio al municipio de Tulum y manifestó estar de acuerdo en la reincorporación de ambas comunidades al municipio, en esa ocasión, la síndico municipal, María Arana Sánchez expresó que con el acuerdo de reincorporación se demostraba la voluntad política y auténtico interés para atender y resolver el reclamo de los habitantes abandonados desde hace 14 años.
El acuerdo parecía que iba por buen camino, hasta que María Hernández Solís, demostró su ambición desmedido y se atrevió a jugar el destino de los habitantes de Yalchén y San Silverio y propuso cambiar estas comunidades por el poblado de Javier Rojo Gómez, más conocido como Punta Allen, a lo que el edil Marciano Dzul, quien tiene intereses económicos en dicho poblado, declaró que a partir del 1 de enero de 2023, los habitantes de Yalchén y San Silverio se quedarán sin servicios públicos como suministro eléctrico, agua potable, seguridad pública y sueldos de los delegados y funcionarios municipales.
Cabe recordar que los poblados de Yalchén y San Silverio han sido controlados políticamente por el edil de Tulum, Marciano Dzul, por lo que se puede decir que sus habitantes siempre han sido usados para llenar eventos donde se requiere mostrar músculo político, los pobladores de esas dos comunidades son llevados a donde el munícipe disponga, como lo fue la “elección” interna de morena el 30 de julio pasado en la que David “Fili” Tah Balam fue el encargado del acarreo de más de tres mil personas con la intención de que Marciano Dzul logrará controlar la representación del partido en el distrito electoral uno de Quintana Roo.
En el año 2020 los habitantes de estas dos comunidades rurales, solicitaron su reincorporación al municipio de Tulum, Víctor Mas Tah, presidente municipal en ese entonces, integró una comisión edilicia para atender y solucionar el problema geográfico, la comisión estuvo integrada por Keivyn Alegría Santuario, primer regidor quien presidió la comisión, Patricia de la Torre, cuarta regidora, Marciano Dzul, séptimo regidor y Yenny López Landero, octava regidora.
En la segunda reunión de trabajo, a la que no asistió Marciano Dzul, se dio a conocer que se había establecido comunicación con el entonces presidente municipal de Carrillo Puerto, José Esquivel Vargas “Chak Meex” y se informó al entonces gobernador del estado, Carlos Joaquín González y a la XVI Legislatura para realizar los trámites necesarios para la reintegración del territorio abandonado desde 2008, por el mismo Marciano Dzul Caamal, primer presidente municipal del noveno municipio.
Pero tras la ignorancia política y ambición desmedida de María Hernández quien menospreció la experiencia política de Marciano Dzul, quien ha creado una gran red de intereses económicos por la especulación de tierras en Tulum, que ni María Hernández, ni su cuñada Yensuni Martínez, presidente municipal de Othon P. Blanco, podrán vencer, los habitantes de Yalchén y San Silverio seguirán en el limbo gubernamental, ya que los Diputados Silvia Dzul Sánchez (hija de Marciano) y José María Chacón Chablé (socio de Yensuni) no los atenderán porque están más preocupados por sus intereses personales que los de los ciudadanos.
